jueves, 27 de diciembre de 2018

INTENTO

Prefiero olvidarlo


a no haberlo vivido


Jamila
27/12/2018

Un cuento en navidad

Se lo había imaginado desde que lo trajeron a la casa la noche anterior. Ella sabía que sería el crimen perfecto gracias a su extraordinaria reputación, a su fama de mantener una intachable conducta, su constante buen humor y su carácter bondadoso y sencillo, estaba segura que nadie sospecharía y más aun, ningún otro podría asumir la culpa sin saber a quién estaría encubriendo. Definitivamente el crimen perfecto. Y así, aprovechando el descuido de todos los invitados reunidos en el jardín, fue a la cocina, tomó el cuchillo y se dirigió cautelosamente al comedor donde él se encontraba solo y sin vigilancia alguna. Lo observó un instante y deslizó con fuerza y rapidez el cuchillo mientras su boca se hacía agua, así, como a los perros de Pavlov. Estaba hecho y nadie la creería capaz. Ella había mutilado el pan de jamón.

Jamila
22/12/2018



sábado, 15 de diciembre de 2018

UNA DE NOSOTRAS

I

Ella
con su piel aceitunada
con sus cinco luceros buenos
con su historia de maltrato
y sus recuerdos enteros
Ella es una de nosotras.

II

Ella
con su acento marabino
con su músico inquieto
con su sazón caserito
y sus críos también inquietos
Ella es una de nosotras.

III

Ella
con sus cabellos rulos
con sus dos hermosos sueños
con su teatral estampa
y su espíritu guerrero
Ella es una de nosotras.

IV

Ella
con sus miedos que atormentan
con su gentil caballero
con sus ideas brillantes
y sus genuinos deseos
Ella es una de nosotras.

V

Ella
con su hablar insaciable
con sus 2 tímidos genios
con su menuda figura
y su batalla por lo bueno
Ella es una de nosotras

VI

Ella
con su nombre de tocaya
con sus piernas para ligero
con su prole de artistas
y su curriculum lleno
Ella es una de nosotras

VII

Ella
con su cadencioso baile
con su necesidad de deseo
con sus tres mujeres tiernas
y su búsqueda sin freno
Ella es una de nosotras.

VIII

Ella
con su guitarra sencilla
con su voz de trueno chileno
con su claridad eterna
y su amor por nuestro suelo
Ella es una de nosotras.

Jamila
16/11/2018

Petro historias de estos dìas

De tanto conocerla él ya podía anticiparla, sospechaba que ese día lo haría de nuevo, eran los indicios que tenía: se lavó y se secó el cabello el día anterior, preparó la comida con anticipación, dejó la lavadora vacía, dio instrucciones a los hijos, preparó ropa fresca y cómoda como quien se prepara para una larga jornada. Todo lo indicaba con claridad. Y así fue, tal y como él lo predijo, ella se levantó de madrugada, se dio un baño corto sin humedecer su cabello, se trajeó con la ropa preparada el día anterior sin encender la luz y creyéndose sigilosa en su trajín matutino, sin advertir que él había despertado, salió, así a la hora de los gallos a hacer la cola del banco. Era momento de cobrar la pensión. 

Jamila
12/12/2018

viernes, 21 de septiembre de 2018

DESVENTAJA


Te propongo un trueque sin lugar a arrepentimientos.

Tu mirada brillante por mi mirada esquiva
Mi respiración entrecortada por tu discreta sonrisa
Tu silencio inquietante por mis oídos sedientos
Mi certeza absoluta por tu duda razonable
Tus deseos no alcanzados por mis mejores logros
Lo mejor de mi baile por la cercanía de tu piel
Tu canto melodioso y sereno por mi parloteo estridente
Toda la historia de mi vida por una ficción compartida
Un minuto de tus pensamientos por mi obsesión incurable
Mi alma a cambio de nada

Jamila
21/09/2018

lunes, 27 de agosto de 2018

ENCADENAMIENTO

Imagina ¿me podrás desentrañar?


Desentrañar: del verbo mírame a los ojos y conóceme.

Conocer: del verbo usa lo que sabes y sométeme.

Someter: del verbo no me sueltes, poséeme.

Poseer: del verbo hasta levitar.

Así

Jamila
27/08/2018

viernes, 9 de febrero de 2018

3 Palabras


¡Domingo! ¿Tenía que ser siempre en domingo? Dejó fluir un fuerte suspiro, de esos que te sumen en la más profunda resignación y arrastró pesadamente cada uno de sus pasos. Mientras avanzaba conocía con detalles el desenlace que habría de acontecer y aunque albergaba dentro de sí una convicción de derrota lacerante también atesoraba una falaz esperanza.

Un par de minutos después se encontró con toda su humanidad tras la puerta de la habitación, sabía, como de hecho ocurrió, que al abrir la puerta su octogenaria mirada se encontraría con la de la misma mujer, cuarentona, robusta y mal encarada, invariablemente vestida de blanco, quien al verle dejaría salir de su boca ese áspero y chocante sonido que portaba por voz.

Todo fue de la misma forma y su sentencia, como siempre, constó de 3 palabras, sólo 3 palabras: “hora del baño”.

Jamila
09/02/2018

Aclaratoria